Síndrome de piernas inquietas

El síndrome de piernas inquietas o enfermedad de Willis-Eckbom, es un trastorno del movimiento que ocurre principalmente durante períodos de inactividad o durante el sueño. Se caracteriza por síntomas progresivos referidos por el paciente como molestias, ardor, quemazón o desasosiego que ocurren principalmente en miembros inferiores durante periodos de inactividad, generalmente en la noche y que se alivian con la actividad física. En la medida en que los síntomas aumentan y el pacientes empeoran las molestias se extienden a miembros superiores, ocurren con más frecuencia, se presentan incluso durante el día y cada vez es menos probable que mejoren con la actividad física. Aparte de las molestias descritas son una causa de sueño fragmentado, ansiedad, depresión y somnolencia diaria llegando a alterar mucho la calidad de vida de los pacientes.

El síndrome de piernas inquietas tiene una prevalecía de cerca del 3% dentro de la población general, siendo la segunda patología del sueño en frecuencia después de los problemas respiratorios del sueño.

A pesar de ser una entidad tan frecuente no se suele realizar su búsqueda en el cuidado primario y la mayor parte de los pacientes permanece sin diagnóstico y tratamiento, lo que no debiera ser ya que su diagnóstico es muy sencillo aplicando las cinco preguntas del cuestionario del IRLSSG y su gravedad también puede ser fácilmente cuantificada con la escala de severidad del IRLSSG.

La enfermedad se clasifica en dos grupos, primario o idiopatico, en el que no se identifica una causa de los síntomas. En este grupo está el 80% de los pacientes y se cree que se debe a un trastorno del movimiento relacionado con mala captación de hierro por el receptor de dopamina y que suele tener una tendencia familiar importante pues casi siempre los pacientes  tienen  familiares en primer grado con síntomas similares. El síndrome de piernas inquietas secundarios se encuentra asociado a otras enfermedades como anemia ferropenica, diabetes, insuficiencia renal crónica, polineuropatias y enfermedad de Parkinson. También se presenta con frecuencia en el embarazo.

Si bien el diagnóstico es totalmente clínico como referimos anteriormente, la realización de una polisomnografia es de utilidad porque el 80% de los pacientes presenta movimiento periódico de piernas durante el sueño.

Para el tratamiento es importante considerar medidas no farmacológicas como higiene del sueño, terapia relajante, yoga, masajes nocturnos y el uso de medicamentos similares a los usados en la enfermedad de Parkinson. Consulte con su médico.

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